Los piercings en la lengua pueden dañar tus dientes
Introducir un piercing en la lengua u otro piercing oral en tu boca puede tener consecuencias para la salud
bucal con el tiempo. La Asociación Dental Americana ha publicado varios estudios advirtiendo sobre los
piercings
en la lengua, labios y encías.
¿Por qué pueden ser peligrosos para tu salud bucal? Con el tiempo, la fricción del piercing contra tus
dientes,
encías y labios puede causar daños. Es difícil resistirse a jugar o manipular el stud o la barra, lo que hace
que roce contra los dientes. Esto puede provocar astillas en los dientes, empastes o coronas.
También puede hacer que los dientes se muevan: de manera similar a los frenillos pero en sentido contrario, el
contacto constante con el piercing de metal acabará empujando los dientes, lo que causará la aparición de
espacios o que los dientes se desalineen. El contacto del piercing con las encías también puede hacer que las
encías retrocedan, lo que resulta en una mayor sensibilidad, así como posibles problemas de caries y otros
problemas.
El propio piercing puede causar daño al cortar los vasos sanguíneos en la lengua o las encías, según la zona
perforada. Esto puede causar una gran cantidad de sangrado. Si decides hacerte un piercing, asegúrate de
acudir
a un estudio de piercing acreditado que cumpla con las normas médicas y tenga el equipo adecuado.